domingo, 23 de julio de 2017

MODA


Las peores rivalidades de la moda

Eternas peleas y juicios han estado presente en el mundo glamouroso de la alta costura


En el mundo de la moda parece que todo es miel sobre hojuelas, sin embargo al escarbar un poco nos damos cuenta que creativos, empresarios y modelos tienen mucho que decir uno de otro.
Lucinda Chambers vs. Vogue. Con la llegada de Edward Enninful, nuevo editor en jefe de la revista Vogue, la directora Lucinda Chambers fue despedida después de 36 años de estar a la cabecera. Un mes después levantó polémica con sus declaraciones: “hay demasiados secretismos en la industria”, “la moda puede masticar y escupirte”, dijo a Vestoj.


Meryl Streep vs. Chanel. Para los Oscar, la actriz y la firma se enfrentaron por el vestido que iba a lucir Meryl. En principio, la casa iba a vestirla para el evento con un diseño de alta costura con un valor de 100 mil euros, pero el equipo se Streep exigió que se le pagara por llevarlo: “Nosotros no pagamos”, dijeron desde Chanel. Finalmente todo quedó como un malentendido y Streep lució un Elie Saab.


Coco Chanel vs. Elsa Schiaparelli. Bettina Ballard, editora de moda, describió cómo en una fiesta de disfraces Coco provocó que el vestido de Marisa berenson se quemara con el fuego de unos candelabros. Marisa Berenson, modelo y nieta de Schiap, dijo 15 años más tarde a Vmagazine que Chanel estaba “celosa” de su abuela. Según Balenciaga “Coco tenía poco gusto, pero bueno y Schiaparelli tenía mucho, pero malo”.


Nicolas Ghesquiere vs. Balenciaga. La maison demandó a su antiguo director creativo por las declaraciones que hizo Ghesquiere, ya que dañaban la imagen de la casa: “Empecé a sentirme exprimido, como si quisieran robar mi identidad”, confesó para la revista System.


Danatella Versace vs. Giorgio Armani. El diseñador hizo unas declaraciones para The Sunday Times en su encuentro con Gianni en roma “Me dijo que él vestía zorras y yo, señoras de iglesia”. A lo que Versace respondió que eran palabras “maleducadas y sin gusto”. “Cuando mi hermano habla de moda la única palabra que le venía a la boca era 'glamour'”, defendió la creativa italiana.


Cathy Horyn vs. Hedi Slimane. La lengua afilada de Cathy acabó por desterrarla de los desfiles de Slimane, quien estaba al frente de Saint Laurent: “Es una persona que hace bullying en el patio del colegio”, escribió el diseñador. La crítica de New York Times también tuvo un encuentro con Oscar de la Renta, del que dijo que parecía “más un perrito cliente que una eminecia de la moda estadounidense”.

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Fuente: Soy Carmin.

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